martes, 2 de junio de 2015

AZAR E IMPERFECCIONES



Me da miedo que un altavoz no esté bien anclado a la pared y se abata sobre mi cabeza.

Me da miedo cuando hay una concentración de   gente grande encima de un parking o de una terraza, por si no está calculada la estructura para esa sobrecarga, o que, ni siquiera se calculase, por ser muy antiguo.

Me da miedo que se desprendan las cornisas por falta de adherencia, que las tejas no soporten un día de fuerte viento, que un cristal caiga, por un azar desconocido, dentro de mi bota y corte como un bisturí venas y arterias.

La imperfección domina el mundo. Todo es falible. Los errores humanos unidos al azar proliferan en un mundo imperfecto.

LA PRUEBA DE TYLER DURDEN



Durante unos días Tyler Durden se ha metido en vuestras vidas y las ha anegado de sus mordaces pensamientos. Se ha colado en la intimidad de vuestras casas.

Durante unos días Tyler Durden ha dinamitado con polvo de hipoclorito vuestras vidas y ha dejado una cicatriz en el dorso de vuestras manos que deja de doler sólo con vinagre y, que empezó a doler con la saliva de los labios húmedos de Tyler.

Durante unos días habéis sido el conductor biliar furioso de Jack, la sensación de rechazo rabiosa e irritada de Jack, las tripas retorcidas y vacías de Jack.

Durante algunos días mucha gente se habrá preguntado quien es Tyler Durden.

En algún punto de este planeta que camina hacia la autodestrucción Tyler Durden y Chuck Palahniuk se reirán.

LA MIRADA DE TYLER



Cuando mi mejilla rozó la mejilla de Tyler me di cuenta que estaba mojada. Se me quedaron restos de sal en la cara y me pregunté qué le haría tanto daño.
En la ciudad del viento y el mar, siempre hay humedad en el ambiente, el mar está a dos pasos y el viento juguetea con tu pelo.
La mirada de Tyler es un acertijo y yo me pregunto si Tyler es consciente de ello.