lunes, 19 de septiembre de 2016

TU REFUGIO

Quiero ser tu oasis,
en mitad del sol abrasador del desierto.

Quiero ser tu consuelo,
en la soledad de las noches sin luna.

Quiero que encalles
en esta isla desierta.

Quiero ser el mar en calma
donde zozobras tras la tormenta.

Quiero abrazarte tan fuerte
que se junten todas tus partes rotas.

Quiero besar tus cicatrices,
hundirme en la frondosidad de tu pelo.

Quiero ser el bosque
donde te pierdas.

Quiero que despiertes
en la lánguida calidez de mis brazos.


Quiero ser tu iglú en mitad de la Antártida
cuando arrastres tus pasos sobre el gélido hielo.

Quiero que flotes
sobre este mar muerto
y que te deshagas
de todas las noches frías
que caen sobre tu espalda.

Quiero ser refugio y calma,
en tus días turbios. 

sábado, 3 de septiembre de 2016

EL PASADO DE LOS RELOJES DE ARENA

“Sólo el blanco para soñar”
Arthur Rimbaud

Deseo,
sábanas limpias todos los días,
que no se ensucien las alfombras,
que la televisión no me mienta.

Anhelo,
no tener pasado,
no tener armarios,
ni cepillos de dientes usados.

Ansío,
empezar de cero,
no romper la vajilla de los domingos,
no tener memoria ni cicatrices.

Aspiro,
a la pureza de las historias por empezar,
a la sonrisa de lo nuevo,
a sentir mis pies sobre hierba fresca.

Me mata,
caminar en círculos,
no cerrar las heridas,
perdonar 33 millones de veces.

Me fustiga,
la levedad del antes de ayer,
el peso del mes pasado,
las espinas de la sangre.

Me envenena,
las palabras como fusiles,
la sonrisa sarcástica del despertador,
el sol de mediodía.

Me angustia,
los que enturbian el agua,
los que aman la perfección,
y todo el pasado de mis relojes de arena.


ESCLAVOS DEL SISTEMA

ESCLAVOS DEL SISTEMA

Hace ya tiempo que me bajé del carro. Cada día estoy más segura de mi decisión. Seguí el camino que me mostraron mis amigos, Lorena, Ruski y Asun entre ellos. Me metí en la senda de los disidentes, nadando a contracorriente. Me mostraron el camino amigos, libros, filósofos, psicólogos, músicos y poetas. Cada día más contenta de bajarme de ese barco que se hunde bajo nuestros pies. No fue fácil abrir los ojos en un mundo tan alienado.

 Miro a mi alrededor y me quedo estupefacta de lo que veo. Creo que soy de Marte. No comulgo con este sistema. Un sistema que tiene esclavos, ya no digo esclavos en Taiwan o Bangladesh. Esclavos aquí a mi alrededor, en la España de sangre y arena. Gente que no puede dormir. Que se levanta a las 3, a las 5 o a las 6 de la mañana para trabajar. Que van muertos de sueño a trabajar y se pasan el día a base de cafés y coca colas. O que hacen turnos de 24 o más horas sin dormir. Vamos contra natura. El ser humano tiene que descansar y dormir. Vamos en contra de la propia naturaleza del ser humano.  Trabajos en los que no se puede beber agua ni ir al baño. ¿Por favor que locura es esta? ¿Cómo veis normal algo así? Está sobrevalorado el trabajo. Ser trabajador y eficiente es un plus. Parece ser que también lo es no pensar. Está muy mal visto el vago. Echad un vistazo al mundo animal. Los animales se pasan el día sin prisa, buscan alimento y el resto del día duermen o descansan y disfrutan de la naturaleza que les rodea. Dios les administra todo lo necesario para vivir. Algunas tribus perdidas también viven así. Pero nosotros no, nosotros somos mejores, más listos, más importantes, ¿en serio que lo somos? Lo que somos es  los más arrogantes, estamos cargados de soberbia. Ningún animal se esclaviza a sí mismo ni esclaviza a sus semejantes. ¿Pero es que estamos locos o qué?

Pararos un momento a pensar ¿En serio  que necesitas un modelito nuevo cada mes? ¿En serio que necesitas ir a la peluquería? ¿En serio que necesitas casarte con un bodorrio por todo lo alto en el que se tiran toneladas de comida? ¿En serio que necesitas un coche nuevo? ¿En serio que necesitas aire acondicionado? ¿En serio que necesitamos tantas cosas para ser felices? ¿En serio te apetece esclavizar tu vida para tener todo eso? Como dice Rafael Santandreu esta sociedad padece necesititis.
Sociedad de la opulencia, el despilfarro y el consumismo. Armarios repletos de ropa que no nos ponemos. Neveras repletas de comida que la mitad de ella va a la basura. Y no lo digo yo, lo dicen las estadísticas. Comprar, tirar, comprar. Gastar. Usar y tirar. Obsolescencia programada. El sistema capitalista necesita gente infeliz, infeliz con su vida, infeliz con su trabajo, para que consuman. Cuanto más infeliz eres más consumes. Y para consumir más necesitas, por supuesto, trabajar más y ser más infeliz con tu trabajo. ¿No os parece la pescadilla que se muerde la cola? ¿No os parece absurdo todo? ¿Cómo somos tan estúpidos los humanos? ¿No os sentís engañados, estafados? Perdemos la salud en el trabajo toda nuestra vida para acabar muriendo. Y la televisión alienando a las masas con la publicidad. El estúpido catecismo del confort. ¿Acaso nos hace el confort más felices? ¿Acaso ha terminado el aire acondicionado con la depresión o la ansiedad? ¿Qué tenemos que demostrar? ¿A quién tenemos que impresionar? ¿Acaso hay algo que aparentar?
Estas fiestas mientras todos nos divertíamos había otros currando como negros, sin descanso y sin apenas dormir y deseando que acabaran las fiestas. Toda moneda tiene su cruz y su cara.

Una última cosa. Yo no soy ningún ejemplo a seguir ni me quiero poner de ejemplo. Yo también necesito el dinero y trabajar. Escapar de este sistema es complicado. He tenido trabajos esclavizantes  que he dejado a los 3 días. Gracias a Dios no tengo hijos que mantener. Hay gente que tiene que sacar adelante una familia.

¿Sabéis lo único que creo que necesita el ser humano? Ser feliz. Amar a los demás. Divertirse. Aprender. La vida es un chollo y la convertimos en un infierno nosotros solos.

Lennon era un visionario y en el siglo pasado ya dijo “Vivir es fácil con los ojos cerrados”. Precisamente esa canción se compuso en Almería. Strawberry fields.  Si vosotros queréis seguir con los ojos cerrados nadie lo va a impedir. Si queréis seguir con los ojos cerrados aquí paz y después gloria. Yo ya he empezado el cambio y muchos como yo y esto no hay quien  lo pare. Mi próximo libro va por estos derroteros y va a ser una bomba. Ansío el momento de tener tiempo para poder sentarme  a escribir