más cargado viene el ron”
Andrés Suárez
CUANDO BAJA LA MAREA
Entonces baja la marea
y nadie está a salvo.
Te vas sin despedirte
y la sal tiñe mis mejillas.
Busco y no encuentro.
Me dejo caer en el sillón sin fuerzas.
Llueve sobre mojado.
Entonces baja la marea
y no acierto a la diana.
Tu recuerdo se bebe el oxígeno de la casa en silencio
y no hay cicatriz que no duela,
ni traje que me siente bien
ni faros que iluminen mi camino
ni estrella polar que indique el norte.
Entonces baja la marea,
y con ella el telón,
y se acaba la función.
Bajo las escaleras
y en el sótano hay goteras y humedad.
Mi mente olvida y retiene lo que no debe,
y te vuelves mi enemigo.
Entonces baja la marea
y me trae el juego sucio de siempre:
tu echándome un órdago
y yo voy a chicas.
La lengua me escuece,
tu mano está fría
y cuando me miras me cuesta reconocerte.
Entonces baja la marea,
cambio de acera cuando te veo,
digo nunca más
y hay una trampilla que se abre bajo mis pies
y me lleva a otra dimensión donde tú no existes.
Y me falta el arrojo, la osadía y la valentía
para no volver a salir de este cuarto.
Es entonces cuando baja la marea
y llega la otra,
la que puebla las tinieblas,
la que se esconde bajo mi piel
y sale los días turbios.
Y con ella aquí a mi lado…
…no eres nada.
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