INSTANTES MÁGICOS

A veces te crees que perteneces a algo superior, que dejas de ser uno para formar parte de algo elevado. Pero luego ese instante mágico de comunión con el mundo se esfuma y te sumes, por un momento, en tus miserias. Esos instantes son mágicos y todos los hemos sentido alguna vez. El mundo está a tus pies. Eres el dueño de un alma que vuela. Pero sólo es un instante, es de esa felicidad tan difícil de atrapar. Te puede pillar escuchando una canción mientras das un paseo, puede ser cuando miras los ojos inocentes de un niño, cuando hueles algo maravilloso, cuando bailas una canción o tienes una conversación intensa y profunda con alguien. No tienen porqué ser cosas muy especiales, son cosas sencillas llenas de magia que te transportan a otros mundos que te hacen amar la vida y desear que vuelva a suceder. Pero esos instantes son caprichosos y aparecen cuando menos te lo esperas. Sólo por ellos merece la pena vivir. La mayor parte del tiempo siento que no pertenezco a nada, me siento como un astronauta en Marte. Sólo soy dueña de esos instantes, el resto del tiempo todo es ajeno.